Jena, Alemania

(Por Rowena Schmidt, 1º de Intermedio)

Jena es una pequeña ciudad en el estado de ‘Thüringen‘, el corazón verde de Alemania. 

Las montañas de Jena

En Jena viven aproximadamente 100.000 habitantes. Un tercio son estudiantes, así que hay mucha gente joven. Por eso existen en Jena varios cafés y bares con ambiente estudiantil, y la oferta cultural es muy interesante.

Antes vivían y trabajaban Friedrich Schiller y Johann Wolfgang von Goethe en Jena, ¡pero sólo durante unos años! Sin embargo, la ciudad está muy orgullosa de su historia y ahora, para homenajear a los dos famosos escritores alemanes, calles, casas, una iglesia, un cine y en mayor medida una de las dos universidades se llaman como uno de los dos escritores.

El campus universitario

Si tú vas a Jena, lo que no te puedes perder es tomar un trozo de pastel en mi café favorito, que se llama ‘Siempreverde‘ (Immergrün). ¡El mejor pastel de la ciudad!

Para ir de marcha te recomendaría visitar la bonita ‘calle de Wagner‘ (Wagnergasse), donde hay muchos bares. A la gente a quien le gusta la música electrónica, también puedo recomendar ir a la discoteca ‘Casablanca‘ (Kassablanca). O si tienes la oportunidad, visitar una fiesta privada en un piso compartido de estudiantes: ¡Siempre hay más gente que espacio!

Mientras estás en Jena, deberías hacer excursiones a pie: la ciudad está rodeada de pequeñas montañas y la vista vale la pena durante todas las estaciones del año.

La playa al lado del río Saale

Lo que más me gusta es que la ciudad es tan pequeña que tú puedes ir andando a todos los sitios. Sólo hay un edificio muy, muy grande en el centro de la ciudad. Es redondo y por eso la gente le llama el "Paquete de  Galletas‘ (Keksrolle). Hay una gran plaza de aparcamiento al lado de esto edificio y desde hace mucho tiempo se quiere construir algo allí. Finalmente, han decidido construir otro centro comercial. Ya hay bastantes y por eso ha habido muchas manifestaciones este verano en Jena.

Mi hermana y el "Paquete de Galletas"

Normalmente hay manifestaciones para más espacio habitable. Es que Jena es muy querida y cada año hay más gente, pero no hay suficientes edificios: ¡Encontrar una habitación es una tortura para cualquier estudiante! Las bibliotecas y las cafeterías están repletas también la mayoría del tiempo.

Otra cosa que no me gusta es el ferrocarril de Jena: es tan malo que necesitas mucho tiempo para ir a otras partes de Alemania. En tren yo necesitaría al menos cinco horas y media para visitar a mi familia. (En coche el mismo viaje dura tres horas).

De allí, me traería a mis compañeras de piso, el sistema universitario y, por supuesto, el pan. De aquí, me llevaría una churrería. Pienso que es la única cosa que falta en Jena, ¡por lo demás la ciudad es perfecta!